Los entrenamientos de Ferrari en Sakhir no están siendo precisamente tranquilos. Si primero las tormentas de arena retrasaron el trabajo de la escudería italiana, ahora le ha llegado el turno a los problemas mecánicos.
Felipe Massa, que ha cogido el testigo de Raikkonen en Bahrein, tuvo que regresar a los boxes a baja velocidad cuando había dado sólo cuatro vueltas al circuito en la tercera jornada de pruebas. La culpa fue esta vez de la caja de cambios. Los mecánicos repararon la avería y el piloto brasileño pudo volver a la pista para completar 105 giros.
En la segunda jornada fue el KERS, el polémico sistema de recuperación de energía cinética que no convence prácticamente a nadie, el que dio problemas a Ferrari. Se averió y Raikkonen perdió tres horas en los boxes, aunque luego el finlandés fue el más rápido.
Timo Glock se anotó el mejor tiempo (1:32.492) del día a los mandos de su Toyota, sacándole casi medio segundo a Massa. Completó 132 vueltas al trazado y fue el único piloto que no tuvo problemas, ya que el tercer participante en los entrenamientos, el también alemán Nick Heidfeld, perdió también bastante tiempo por los problemas de su BMW.